Chiquinha Gonzaga: la primera gran compositora brasileña

Chiquinha Gonzaga fue mucho más que una compositora: fue pionera, abolicionista, feminista y una verdadera revolución con partituras. Conocé su historia y descubrí cómo cambió la música brasileña… para siempre. 📖 Leé el artículo completo en el blog.

5/19/20252 min read

¿Quién fue Chiquinha Gonzaga?

Francisca Edwiges Neves Gonzaga, más conocida como Chiquinha Gonzaga, nació en Río de Janeiro el 17 de octubre de 1847. Hija de una ex esclava y de un oficial del Ejército Imperial, Chiquinha fue criada con una educación refinada, pensada para convertirla en una dama de la corte. Aprendió a leer, escribir, matemáticas y, por supuesto, música. A los once años compuso su primera pieza: un villancico que tocó en una reunión familiar.

A los dieciséis años fue obligada a casarse con un marino de futuro prometedor. Sin embargo, él veía su pasión por la música como una amenaza, y prohibió que tocara el piano. Chiquinha, rebelde y decidida, eligió la música. Abandonó a su marido, y debido a esto, fue abandonada por su padre. A los dieciocho años, sola y sin recursos, comenzó a dar clases de piano para sobrevivir.

Su primera obra publicada fue la polca "Atraente" en 1877, que fue un gran éxito y marcó el inicio de su carrera profesional. Luego se unió al grupo liderado por Joaquim Callado, el padre del choro, integrándose a un círculo de músicos populares y ganándose el respeto de sus colegas.

Chiquinha no solo se destacó como música y compositora, sino también como una activista social. Participó activamente en el movimiento abolicionista, vendiendo partituras para recaudar fondos para la causa. Fue una de las primeras mujeres en vivir de la música en Brasil, en una época en que la profesión de compositora era territorio exclusivo de hombres.

En 1899 compuso "Ô Abre Alas", la primera marcha carnavalesca de la historia del Brasil, inspirada por un grupo de carnaval que pasaba frente a su ventana. La canción se convirtió en un himno del carnaval y la consolidó como una figura central de la música popular.

Su obra teatral también fue impresionante: compuso la música de más de 60 obras de teatro, incluyendo la exitosísima opereta "Forrobodó", que tuvo más de 1.500 funciones consecutivas tras su estreno en 1912.

En 1914, su música rompió otra barrera social: la primera dama de Brasil, Nair de Teffé, interpretó el tango "Gaúcho" (de Chiquinha Gonzaga) en una recepción oficial en el Palacio do Catete, provocando escándalo entre la elite conservadora y legitimando los géneros populares en espacios oficiales.

Ya en su madurez, Chiquinha fundó la Sociedade Brasileira de Autores Teatrais (SBAT), convirtiéndose en una defensora de los derechos de autor en Brasil. En su vida personal, compartió sus últimos años con Joãozinho, 36 años menor, a quien registró legalmente como su hijo adoptivo y fue el principal responsable por la preservación de su legado.

Chiquinha Gonzaga falleció en 1935, a los 87 años, dejando un legado inmenso: cerca de 300 composiciones para piano, voz y teatro; 559 grabaciones y 62 obras teatrales con música de su autoría. Fue, y sigue siendo, una referencia imprescindible en la historia de la música brasileña, no solo por su talento, sino por su valentía, independencia y pasión por la libertad.